¿Cómo afecta el potasio al estrés hídrico?

La falta o exceso de agua repercute negativamente en la producción de grano de maíz, ocasionando pérdidas millonarias año tras año.

El agua, además de ser el principal componente de las células y de mantener una temperatura adecuada dentro de la planta, ayuda en el transporte de potasio y otros nutrientes desde la solución del suelo hasta los órganos superiores de la planta.

Una buena cantidad de nutrientes minerales en el suelo, junto con un adecuado nivel de humedad, asegura un buen crecimiento del cultivo. Sin embargo, cuando el suplemento de agua es deficiente, la disponibilidad, absorción y transporte de nutrientes se ven limitados.

Mantener una cantidad adecuada de potasio en la planta es clave para que esta soporte mejor el estrés ocasionado por factores tales como sequía, altas temperaturas, enfermedades, insectos, etc.

Las plantas que tienen alto contenido de K requieren menos agua para producir un determinado rendimiento o se puede obtener más rendimiento con sólo un pequeño aumento en la cantidad de agua aplicada. Las respuestas del cultivo a la fertilización con K son a menudo más altas cuando el agua es deficiente o excesiva.

Entre los factores relacionados con el mejoramiento de la eficiencia del uso del agua y la resistencia a la sequía, cuando se aplica K, se pueden citar los siguientes:

  • Aumento en la exploración del suelo por la raíz. En suelos con cantidades adecuadas de K se promueve el crecimiento y proliferación de raíces. Una mayor penetración de la raíz generalmente aumenta el volumen de suelo en contacto con ella, dando a las plantas un mejor acceso al agua del suelo.
  • La baja humedad del suelo altera los procesos fisiológicos de las raíces disminuyendo el crecimiento. Suficiente K incrementa la elongación, la turgencia y la tasa de regeneración de la raíz.
  • El K incrementa la eficiencia de la fotosíntesis y evapotranspiración. Una de las principales funciones del K es ayudar a la apertura y cierre de los estomas. Si los estomas no se abren y cierran adecuadamente la planta no fija suficiente CO2 y pierde agua a través de la evapotranspiración.
  • La deficiencia de uno o más nutrientes como el K, detiene la tasa de crecimiento del cultivo.
  • Se puede disminuir el estrés en épocas críticas de crecimiento. El K generalmente acelera el desarrollo del cultivo y madurez.

Como conclusión cabe decir que una fertilización balanceada es factor clave para que la planta logre una mayor eficiencia en el uso del agua. La planta tiene que tener acceso a la cantidad de nutrientes necesarios en el momento preciso para un óptimo desarrollo y así estar mejor preparada para soportar el estrés de agua. Aplicar K en la cantidad adecuada y en el momento justo puede ser la diferencia entre obtener una excelente cosecha o no.

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